Los caquis siguen siendo una fruta un tanto desconocida, pero a la vez hay mucho que decir sobre ellos. Desde su origen, su cultivo, sus distintas variedades, cómo es su ciclo y su cosecha. En este artículo vamos a ir resolviendo de a poco cada uno de estos interrogantes.
Vamos a entrar de lleno en el cultivo de esta deliciosa fruta que llegó de Asia y se adaptó al clima mediterráneo a la perfección. Para poder saber a fondo todo sobre el cultivo de esta deliciosa fruta, iremos al campo de Eduardo, agricultor y fundador de Campos del Abuelo. En sus parcelas cultiva naranjas, pero también caquis. Y además, los ha plantado desde cero, por lo que conoce de cerca el proceso completo ¿Vamos a descubrirlo junto a él?
Origen y producción del Caqui
Así como la naranja, el caqui es oriundo de Asia. Aunque no se sabe con certeza cómo llegó a suelo español, la teoría más fuerte dice que llegó desde China en el s.XVII. Aunque hay quienes afirman que llegó desde Japón. De todas maneras, lo cierto es que hasta la actualidad, ambos países son los principales productores de caqui del mundo.
En España se adaptó perfectamente al clima mediterráneo, por lo que la zona de Valencia, específicamente la de la Ribera Alta del Río Júcar, es uno de los lugares donde más producción de esta fruta existe. A su vez, en España se produce caqui para exportar a otros países europeos.
Lo cierto es que esta fruta está asociada en cierto punto al pasado, a la fruta que comían nuestros abuelos. La cantidad de azúcar que tiene una vez que está maduro es alta, lo que lo transforma en un manjar ideal para golosos, pero a la vez, en un manjar muy saludable.
El cultivo del caqui
El cultivo de esta fruta, como el de todas, comienza por una pequeña semilla. Esta semilla pertenece a un árbol que llamamos “borde” o “pie”, es decir un árbol que nos dará frutos pero que no tiene una variedad. Por eso, una vez que el árbol pie o borde ha crecido, lo que hay que hacer es injertar el árbol con una variedad determinada. Esto nos explica Eduardo directo desde el campo:
Los árboles de caqui se siembran con la raíz desnuda. O sea, se pone lo que es la semilla, esta crece y luego se injerta la variedad. La semilla que nosotros utilizamos para el árbol pie o borde del caqui es de variedad Lotus. Hay varios pies, pero el mejor para la variedad que tenemos nosotros es el Lotus.
Al igual que las plantas de aguacate, naranjas o mandarinas, los árboles de caquis deben ser injertados con una variedad para dar frutos con determinadas características. Y en el caso de los caquis de las parcelas de Eduardo y su familia, la variedad con la que se injertan es con la variedad de Caqui Rojo Brillante, una variedad única y nacida por mutación espontánea en Valencia.
Hay que tener en cuenta que los árboles tardan bastante tiempo en crecer y es todo un proceso el que deben llevar a cabo para dar frutos. Eduardo lo explica así:
Una vez ha crecido dos palmos, se injerta de la variedad que vamos a tener, que en este caso es el Rojo Brillante, que es el más extendido y el más apetecible para los clientes. Y se deja crecer, aproximadamente, una campaña. Una campaña que el árbol llega a hacer medio metro, un poquito menos, tiene ya un tronquito bien, entonces se arranca y se trasplanta.
Con este trabajo en especial, hay que tener cuidado de no dañar a los arbolitos. Eduardo explica cómo es mejor hacerlo:
Puede arrancarse a mano o con máquina, porque tiene mucha raíz y no es fácil de arrancar con herramientas, tienes herramientas especiales. Es bastante pesado de arrancar a mano, pero también se puede hacer a máquina. De las dos maneras funciona bien. Es mejor a mano porque profundizas más, haces menos daño a la raíz. Pero bueno, de las dos maneras se puede hacer.
Una curiosidad que Eduardo nos comenta es que los árboles frutales no se miden por años, se miden por verdes. Él lo explica de la siguiente manera: tú lo plantas y al año siguiente es el primer verde. Aunque el árbol ya lo has plantado en el mes de abril o mayo, se cuenta el verde, que es a el año siguiente. De todas maneras, en años, los míos ahora van a cumplir ocho años en el mes de abril.
La importancia de innovar
Para quienes trabajamos la tierra, sabemos que es un trabajo duro y que, a la vez, está en constante cambio. Aparecen nuevos desafíos como plagas, o vicisitudes climáticas que hacen que todo se modifique. Por eso está bien ir adaptándose a lo nuevo, pero también probar uno mismo a innovar lo que se conoce. Eduardo sabe de esto y lo hizo con sus árboles de caquis.
En mi caso particular, revolucioné un poquito el mundo este de la plantación del caqui, porque aconsejado por la persona que me los vendió, (que además hicimos muy buena amistad) los planté muy pequeñitos, de un tamaño un poquito más grande que un cigarro.
Él ya lo había hecho y se había dado cuenta que funcionaban igual de bien. La diferencia es que si tú comprabas un árbol ya criadito, te costaba 3 € y a mí, una cantidad importante, me los regaló. Esto porque eran arbolitos que la gente no quería, pero que eran buenos.
Fui muy criticado aquí en la zona, me decían que estaba loco, que yo no entendía, que lo mío no era la agricultura. Pero cuando al final del verano, los árboles eran exactamente igual de grandes que aquellos que habían plantado un árbol que había costado los 3 €.
Suelo, clima, agua y ciclo del cultivo de caquis
Seguimos junto a Eduardo a través de sus árboles de caquis. Ahora nos cuenta sobre el clima, el suelo y el riego de estas plantas.
Para comprender bien, comenzamos por el suelo y el clima que le agrada a este tipo de cultivos, nuestro agricultor lo explica así:
El caqui, es un árbol que se adapta muy bien a casi todos los suelos y a casi todos los climas, tanto fríos como cálidos. En cuanto a adaptarse al frío, sucede porque el árbol tira la hoja y no brota hasta el mes de marzo entonces, generalmente, no se hielan. En alguna ocasión puede haber una helada en el mes de marzo y se hielan unas hojas, pero normalmente no sucede.
Parece increíble que el árbol de caqui no sufra heladas de manera habitual. La naturaleza es sorprendente. Pero no solo tiene esta característica, sino que es particular en el suelo que le agrada:
En cuanto al terreno, admite prácticamente todos los terrenos, excepto aquellos que tienen mucha humedad. Por ejemplo las parcelas que tienen aguas freáticas muy cercanas a la tierra y que tienen mucha humedad no les gusta y no funcionan muy bien. Fuera de eso, no hay problema, se puede plantar en todo tipo de tierra.
Algo muy importante en todo cultivo es el riego. Sin agua, nada de lo que hacemos podría existir, y por eso es un tema que nos interesa. Por ejemplo y saliendo un momento del caqui, en un artículo de este blog, hablamos sobre la huella hídrica del aguacate.
Pero volvamos al riego de los arboles de caquis, que según Eduardo, es bastante similar a la naranja:
El riego es un riego normal, como el de un naranjo, no necesita ni más ni menos agua, porque hay épocas, al principio, que necesita un poco más de agua cuando está brotando y cuando empiezan a crecer.
El árbol de caqui es, en particular, un árbol que hace muchísima flor. Pero el árbol mismo, la tiene que tirar y dejar las flores justas, porque sino el árbol no tiene la fuerza para que todas las flores cuajen y se transformen en frutos. Y es importante que, cuando empieza a esporgar, que es la palabra técnica, es decir, a tirar esa flor, hay que regarles menos.
Ahora sí hay algo muy curioso. Y es que el árbol no debe recibir agua en la época de floración. Eduardo nos explica de la siguiente manera:
Si el árbol está muy nutrido en época de floración lo que hace es querer crecer y entonces te tira toda la flor. Entonces, durante los 20 días se cierra el agua, el árbol tira lo que tiene que tirar, deja en el árbol las flores, que serán después fruta, y a partir de ahí ya tiene un riego normal, igual que un naranjo.
El ciclo del árbol de caquis
Todo árbol o planta tiene su ciclo. Y el de los árboles de caquis, como el de naranjas, mandarinas o aguacates, es un ciclo anual. En el caso del caqui, Eduardo lo cuenta mes a mes:
El ciclo, si lo vemos en los primeros días de invierno, primero que nada tirará las hojas. Hay que considerar que ya la fruta está cosechada. Luego de eso, está durante unos tres meses dormido.
Y a finales de febrero, principios de marzo, según el frío que haga, empiezan poquito a poco a sacar los brotes. Y al mismo tiempo que sacan frotes sacan flor también. Cuando empiezan a esporgar las primeras flores es cuando, como contábamos, se corta el agua.
En el momento que florecen, comienza también la polinización, que es de forma tradicional con las abejas y polinizándose entre ellos. No tiene ningún problema de cuaje, porque son variedades que cuajan mucho. El cuajado es ese momento en el que la flor ya está polinizada y pasa a transformarse lentamente en un futuro fruto.
El fruto empieza a crecer y sigue creciendo hasta el mes de finales de septiembre, primeros de octubre, que se empieza la recolección. Y la recolección se puede extender hasta el 15 o el 20 de diciembre.
Se cosechan cuando cogen un color naranja, pierden el color verde y pasa a un color naranja intenso. Entonces, a partir de ese momento es cuando se pueden recolectar.
Con respecto a la recolección, hay algo importante a tener en cuenta: los caquis son frutas de piel muy fina, y por lo tanto muy delicados.
Por ejemplo, no es poco habitual que durante su crecimiento se rayen con el roce de una hoja o un tronquito. Apenas un roce ya la piel del caqui queda con una raya. Por eso es que su cosecha se realiza a mano y con muchísimo cuidado.
Específicamente, se cogen a mano uno a uno y con cuidado, y se van depositando en los contenedores. Y en el caso de los caquis que, de las parcelas de Eduardo, van a tu hogar, también hay que tener mucho cuidado al meterlos en las cajas. No deben golpearse porque, como explicamos, queda una marca.
Y como se sabe, la cosecha marca el final de un ciclo y, en este caso, el final de este artículo. Esperamos que este pequeño recorrido por el mundo del caqui te haya acercado un poco más a esta fruta que tanta historia y trabajo tiene detrás.
Ahora que ya sabes de dónde vienen los caquis de Campos del Abuelo, esperamos que te animes a probarlos. Además, visitando nuestra tienda online puedes ver los productos que tenemos disponibles esta temporada.
Hasta la próxima y ¡gracias por leer!