Hola, hola, buenos días...

Un jueves más llega tu newsletter de confianza, directo desde el campo español 😁.

Parece una locura, pero ya estamos a punto de despedir el 2024. Por aquí el trabajo no para un segundo, seguimos cosechando y montando cada caja para enviar a nuestros clientes en diferentes lugares de nuestro país. 

Cada día nos acompañan frutas y verduras en nuestra vida cotidiana, bueno, en mi caso todavía más porque es mi trabajo, pero todos consumimos frutas y verduras. Y lo cierto es que su presencia nos resulta tan natural que pocas veces pensamos en la historia que tienen detrás.

No hace mucho leí la historia de cómo nació el aguacate Hass. Y, como hemos comenzado a cosechar y a enviar el aguacate Hass en estos días, voy a contarte cómo es que nació porque es realmente curioso. 

Pero antes… ¿Recuerdas que hace un tiempo te hablé sobre los injertos? Es ese proceso por el cual se corta una ramita de un árbol con una determinada variedad y se injerta en otro árbol que no tiene variedad.

Bien pues, ten eso en mente, porque tiene que ver con esta historia. 

El aguacate Hass nació gracias a un cartero de Pasadena, California, llamado Rudolph Hass. Rudolph, compró un terreno en el que había plantados árboles de aguacates y, por otro lado, sembró dos variedades más de aguacates: Lyon y Fuerte. 

(Antes de seguir, te aclaro que el de ahí arriba en la foto es Javi, agricultor de aguacates, no Rudolph el cartero 😂)

Dicho esto, aprovecho y te cuento algo como agricultor: el árbol de aguacate necesita muchos cuidados cuando es bebé. Hemos plantado unos en mis parcelas y tienes que estar echándoles un ojo y casi encima de ellos todos los días para que se agarren bien al suelo. 

Pero volviendo al caso de Rudolph, él tenía los aguacateros grandes que ya estaban en su terreno (que no tenían variedad) y los árboles que él había plantado y cuidado de las variedades Lyon y Fuerte. 

Una vez que los árboles de aguacate Lyon y Fuerte, estuvieron lo suficientemente fuertes y grandes, injertó los árboles de aguacates que ya estaban en el terreno con ambas variedades y esperó. Y esperó y esperó… 

Durante tres años fue cuidando los árboles sin que dieran frutos, volvió a injertarlos y así. Debo decirlo: me siento identificado. A veces, cuando no ves los resultados de tu trabajo en el campo puede llegar a ser muy frustrante. 

Pero este hombre tuvo paciencia. Y al cuarto año de esperar, los aguacateros injertados dieron frutos. Por fuera se veían raros, con la piel rugosa y verde. Y ni que hablar cuando la piel pasó de verde a negra una vez que maduraron…

Pero lo que tenían de raros por fuera, lo tenían de deliciosos por dentro. Y el aguacate Hass no tardó en popularizarse. Y no solo por su delicioso sabor, sino porque su piel es gruesa y protege al fruto durante el transporte. 

Por eso entre los agricultores conocemos al aguacate Hass como el rey de la exportación 😉. 

La verdad es que me ha gustado mucho conocer esta historia y tenía ganas de compartirla contigo, {nombre}.

Por hoy hemos llegado hasta aquí. 

Si quieres conocer más sobre esta historia y sobre el cultivo del aguacate Hass, te recomiendo este artículo sobre el aguacate Hass en el que respondí a muchas preguntas interesantes. 

Hasta la semana que viene...

¡Un fuerte abrazo!

Agricultor

Marketing Campos Del Abuelo